El BROU abre una nueva línea de crédito: Que Dios te lo pague

En una conferencia a la que asistieron figuras políticas del oficialismo, jerarcas del banco, medios especializados en economía y nosotros, el presidente del Banco de la República Oriental del Uruguay (BROU, por sus siglas en español) Fernando Calloia, anunció la apertura de una nueva línea de crédito para deudores morosos del propio banco, hecho este absolutamente inédito en el mundo (según nos hicieron saber los especialistas presentes en el acto). “Que Dios te lo pague” es una propuesta crediticia destinada exclusivamente a aquellos clientes del banco que teniendo deudas con el mismo, le permitirá saldar el préstamo a una tasa de interés muy beneficiosa y a largo plazo.

Calloia comenzó la oratoria con una referencia bíblica: “Mateo capítulo 5, versículo 39, 'Pero yo os digo: No resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele también la otra'. En estos tiempos de renovación eclesiástica que nos toca muy de cerca, entendimos que era el momento de poner la otra mejilla, no como síntoma de debilidad, sino como gesto de generosidad. Todas las personas se merecen una segunda oportunidad, inclusive nuestros deudores”. Y sin apartarse de la línea mística, continuó: “el propio Padre nuestro pide que perdonemos a nuestros deudores. Pues bien, Que Dios te lo pague es la respuesta que el banco tiene para ellos”.

Después de la charla, tuvimos oportunidad de conversar brevemente con el presidente del BROU. Consultado sobre el origen del proyecto, Calloia respondió: “Hicimos una experiencia piloto (piloto como sinónimo de prueba, aclaro que nada que ver con la aviación) con un cliente al que llamaremos JC… No, no es Scelza, es un nombre ficticio… Sí, ficticio como Cosmo, ¿puedo seguir? Gracias. La respuesta del cliente JC fue altamente positiva, agarró viaje enseguida (viaje como sinónimo de aceptar, no en sentido literal, como podría ser, a modo de ejemplo, un viaje en avión). Estudios posteriores nos llevaron a determinar que la solución al problema de la morosidad estaba frente de nuestras narices y no la habíamos visto: tirar la pelota para adelante es el camino”, concluyó.

Más allá de las consideraciones técnicas realizadas por Calloia que, por supuesto, no entendimos, le preguntamos al presidente del banco estatal como lograrían que los clientes cumplidores no se volcaran en masa al nuevo sistema de crédito, ya que les resultaría mucho más ventajoso dejar de pagar. En silencio, Calloia nos acercó el afiche promocional del producto bancario y una lupa. Allí pudimos leer las condiciones que se aplicarán para aprobar el crédito. Transcribimos: “Producto sujeto a aprobación del directorio o del presidente del banco, si los plazos apremian. Sólo podrán acceder al crédito aquellos que posean dos apellidos y el segundo sea Mena, quienes presenten un certificado de bendición papal firmado por Francisco o, eventualmente, aquellos que presenten un certificado de bendición pepel, firmado por Lorenzo. Amén”. Saludó amablemente y se retiró.

Seguiremos informando.